lunes, 30 de enero de 2017

No te detengas, de Walt Whitman

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tu puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.
Huye.
“Emito mis alaridos por los techos de este mundo”,
dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros “poetas muertos”,
te ayudan a caminar por la vida
La sociedad de hoy somos nosotros:
Los “poetas vivos”.
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas.

sábado, 28 de enero de 2017

Te extraño

Te extraño cada día desde aquella tarde 
en que los ángeles decidieron llevarte
lejos de mí, de nuestra familia, de la vida…

Te necesito cada día desde aquella vez:
siento que aún soy una niña que no puede
caminar si no es de tu mano,
que no puede mantener el equilibro en una bicicleta
si no es con tu sostén.

Tantas cosas me enseñaste, tantas lecciones de vida
que me diste con tu ejemplo, con tus sonrisas,
con tus silenciosas miradas color cielo…

Con tu cariño y dedicación a tu familia
me enseñaste lo que significa el amor verdadero.

Nunca dejo de sentir tu ausencia
que me traspasa de lado a lado
y me quita la respiración.

No importa cuánto tiempo pase,
no importa cuántos años cumpla,
voy a necesitarte y quererte por siempre.
Gracias por haber sido y seguir siendo parte de mi vida.
Te extraño, papá... 

lunes, 9 de enero de 2017


Cien sonetos de amor
Soneto XVII


No te amo como si fueras rosa de sal, topacio
o flecha de claveles que propagan el fuego:
te amo como se aman ciertas cosas oscuras,
secretamente, entre la sombra y el alma.

Te amo como la planta que no florece y lleva
dentro de sí, escondida, la luz de aquellas flores,
y gracias a tu amor vive oscuro en mi cuerpo
el apretado aroma que ascendió de la tierra.

Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni de dónde,
te amo directamente sin problemas ni orgullo:
así te amo porque no sé amar de otra manera,

sino así de este modo en que no soy ni eres,
tan cerca que tu mano sobre mi pecho es mía,
tan cerca que se cierran tus ojos con mi sueño.

- Pablo Neruda